Juan Espinoza Espinoza
Tras "La calabiótica social no obnoxia" del maestro Barandiarán
Allá en el lejano 1985, cuando aún era estudiante de Derecho, leí un artículo periodístico de José León Barandiarán, cuyo último párrafo era incomprensible. Ahí, el maestro, siguiendo el pensamiento platoniano, en el cual se exalta a la justicia como "virtud madre", al comentar la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948, afirmaba que "se ha cumplido con lo que expresase Nietzsche, de que para vivir hay que valorar, habiéndose en escopo del bien social dado obstención a una calabiótica social no obnoxia de frangirse senescentemente, siendo de repetir con El Quijote, que "siempre es alabado más el hacer el bien que el mal".